boda Alberto de Mónaco
El ramo de Novia de Charlene de Mónaco
Poco hemos hablado aquí de la boda de Alberto de Mónaco, y no será ahora cuando lo hagamos, una semana después, pero si que tenía ganas de comentar el ramo de novia que eligió y lucio Charlene, la ya princesa monegasca.
A mi la boda me pareció preciosa a nivel estético y es que glamour no faltó.
Qué bonita la ubicación elegida para la ceremonia, la legendaria escalera del patio de honor de la fortaleza Grimaldi, toda decorada con flores blancas, y la distribución que hicieron de los clérigos, los invitados, los novios, la orquesta, el coro y todos lo que allí estuvieron presentes.
Curiosamente la flores blancas, y solo blancas estuvieron presentes en todo momento.
La decoración de la ceremonia. Los pétalos de rosas blancas que les cubrieron a su paso por la alfombra roja a la salida de la boda religiosa. Y el ramo de novia, completamente blanco que pudimos ver en manos de Charlene, el cual fue entregado en la iglesia de Santa Devota, cuya entrada también completamente con flores blancas.
El ramo de novia, que fue diseñado por el mismo diseñador que creó el vestido, si, si Armani ( no creo que lo haga normalmente sino que sería una excepción), fue creado por el Garden Club de Mónaco ( los jardineros oficiales de palacio) y era una composición en cascada que contenía las flores preferidas de la princesa, freesias, orquídeas y muguet (la flor emblema de su país, Suráfrica) .
A mi el ramo me encantó, pero tengo un pero, y es que creo que a ella la quedaba un poco pequeño. No os parece?
Charlene es una mujer muy alta, delgada, pero de hombros muy anchos, y el ramo que en manos de cualquier podría parecer correcto, en ella quedó un poco escaso.
Esto es un error muy recurrente que suele ocurrir en muchas bodas. O la novia lleva un ramo demasiado grande, o demasiado pequeño.
Para no fallar en esto, cuando vayáis a encargar el ramo, explicarle al florista el tipo de look nupcial y es que no es lo mismo si llevas un vestido de novia con una falda muy grande y con velo sobre la cara, que si llevas un vestido recto y/o ajustado, y llevas un tocado.
Teniendo en cuenta esto, y la fisonomía de la novia, el florista debe de crear el ramo prefecto para la novia perfecta!
1 de Julio... Varias bodas famosas...
Buenas noches a todos, aunque sea un poquito tarde no quería que acabara el día sin recordar a todos nuestros seguidores que mañana empieza el mes de Julio, un mes repleto de enlaces matrimoniales...
El 1 de Julio será recordado por muchas parejas que han decidido marcar ese día en su calendario para celebrar su boda.
Entre estas parejas hay muchos novios anónimos que celebrarán su enlace este fin de semana, como mi vecina Verónica y la hermana de mi amiga Laura, Anna, así que desde aquí les deseamos mucha felicidad.
Y como personajes famosos encontramos mañana viernes 1 de Julio la boda en Londres de la excéntrica modelo Kate Moss con su novio rockero de The Kills y la boda en Mónaco la boda de Alberto de Mónaco y la nadadora, Charlene Wittstock.
Son dos bodas muy controvertidas y que seguro que darán mucho de que hablar...
Kate, ha pedido una alfombra valorada en 7000 euros... ha dicho a sus familiares y amigos que en su boda van a encontrar mucho vodka y mucho Rock&Roll... y se espera que el vestido de la novia haya sido diseñado por John Galliano...
Charlene, parece que ha descubierto algo del pasado de su futuro marido que no le gustaba y... quería darse a la fuga, aunque han evitado que lo hiciera.
Así que esperaremos las fotitos de las dos bodas, sin embargo... creo que una puede ser mucho más divertida que otra, ¿no creéis?
Foto Telva.
Detalles de la boda del príncipe Alerto de Mónaco
Desde hace unos meses, la boda entre el príncipe Alberto de Mónaco, de 53 años y Charlene Wittstock, de 33 años, es el tema de conversación. Para dicho evento se está planificando una gran celebración que entre otras cosas incluiría cinco días de fiesta, y estaría a la altura de la boda real del príncipe Guillermo y Kate Middleton.
La boda del príncipe Alberto II de Mónaco contará con 4000 invitados y se llevará a cabo los días 1 y 2 julio, doblando en cantidad a los invitados que asistieron en la catedral de Westminster a la última boda real, donde se celebró la unión del príncipe Guillermo con Catalina Middleton. La lista de invitados se dará a conocer a mediados de junio y se sabe con certeza que asistirán a dicha celebración todas las casas reales.
La ceremonia religiosa, rompiendo con la tradición y el protocolo de la realeza, será celebrada en el patio de honores del palacio del principado y la oficiará el Arzobispo de Mónaco, monseñor Bernard Barsi.
Terminada la celebración por iglesia, el flamante matrimonio dará una vuelta en automóvil para saludar a los habitantes del pueblo. Luego, la pareja hará una parada en la iglesia Sainte Dévote, donde Charlene ofrecerá su ramo de boda.
Es de público conocimiento que el príncipe desea compartir este día tan especial con su pueblo y sus visitantes, y aseguró que el 2 julio, Montecarlo se convertirá en la capital del romanticismo, y espera albergar a miles de turistas de todo el mundo.
Desde hace meses, más de un centenar de personas se ocupan de los preparativos y de todos los detalles de la boda, se estima que acudirán al principado alrededor de 200,000 personas para participar de estas festejos.
Durante este día, la ciudad estará cubierta por pantallas gigantes que permitirán apreciar la ceremonia en directo, se llevarán a cabo conciertos callejeros y tanto hoteles como hosterías estarán preparados para albergar al flujo turístico.
La ceremonia civil se celebrará un día antes de la boda religiosa, en la más estricta intimidad del palacio de Grimaldi, contará con la presencia 50 personas entre amigos íntimos y familiares de la pareja. La boda será dirigida por el presidente del Consejo de Estado y ministro de Justicia, Philippe Narmino.
Una vez acabada la celebración, la pareja se mostrará al pueblo a través del balcón principal del palacio. El futuro matrimonio planea pasar su luna de miel en Sudáfrica, país de origen de la futura princesa.
Otra boda con sabor real a la vista: Alberto de Mónaco y Charlène Witstock
Después de la resaca vivida tras la boda del príncipe Guillermo de Inglaterra y la princesa Catalina, nos tenemos que ir preparando ya para otra boda con mucho glamour, la del príncipe Alberto de Mónaco.
Y es que queda poco más de un mes para que podamos ser testigos de otra boda en la que seguro que vamos a ver también mucho glamour (y a una novia guapísima, sin duda).
La boda va a durar nada más y nada menos que tres días, en los que habrá gran cantidad de actividades para que todo el pueblo pueda vivir el enlace con los novios y su familia. Para empezar, el 30 de junio los Eagles darán un concierto en el estadio Louis II al que asistirán unas 15.000 personas.
La boda civil de la pareja será al día siguiente, a partir de las 17 horas, y estará seguida de un buffet delicioso. Para acabar con este día tan especial, habrá un concierto Jean Michel Jarre, un prestigioso DJ.
Por último, el tercer día se celebrará la esperada unión religiosa de la pareja en la Corte de Honor del Palacio. A las 18.30, la pareja dará el típico paseo por Mónaco, irán a dejar el ramo de la novia a la Iglesia de la Santa Devota y a las 21 horas será la cena oficial en la Ópera Garnier.
La verdad es que ya tengo ganas de ver esta boda. El vestido de la novia, de las invitadas... ¡Con lo que nos gusta a nosotras una boda!
Vía| Vanitatis
Sorprendentes datos de la boda de Alberto de Mónaco
No hay duda de que una de las bodas de famosos de la que más vamos a hablar el año que viene será de Alberto de Mónaco y la nadadora Charlene Wittstock. Y poco a poco, vamos conociendo algunos datos que nos empiezan a demostrar que esta boda será de lo más sorprendente.
Ya lo ha sido el propio anuncio, ya que muy pocos creían que Alberto de Mónaco se iba a casar, pero es que además, Alberto de Mónaco se ha saltado el protocolo. En primer lugar, porque ha cambiado varias veces de fecha hasta que al final se ha decidido por la definitiva (el 1 de julio será la ceremonia civil y el día 2 la religioso).
Pero es que además, el escenario no será el tradicional, ya que se ha decidido por una boda al aire libre. Está claro que la boda va a ser más al gusto de los novios que teniendo en cuenta las normas del protocolo.
Desde luego, la boda no tendrá mucho que ver con la boda en la catedral de Nuestra Señora de la Inmaculada Concepción, de Raniero de Mónaco y Grace Kelly, una de las bodas más bonitas que se recuerdan.
Pero parece que el cambio de escenario podría tener que ver con el interés aperturista que tiene el príncipe, y con el deseo de evitar las comparaciones con la boda del padre de Alberto de Mónaco (que son inevitables, pero odiosas)
Por cierto, que Charlenne tiene que aprender unas cuantas cosas antes de la boda: perfeccionar el francés, aprender a relacionarse de forma adecuada con los medios...
Y es que lo de ser princesa, no es tan fácil como parece.
Vía| Hola
Más datos de la boda de Alberto de Mónaco
Uno de los anuncios que más nos sorprendía en este año de bodas de famosos era el de Alberto II de Mónaco y su prometida Charlene Wittstock, del que poco a poco, vamos teniendo nuevos datos.
De momento, sabemos que la boda de la pareja será por lo civil y que tendrá lugar el 1 de julio de 2011. Eso sí, a diferencia de otras bodas de este nivel, esta se celebrará en la más estricta intimidad y no habrá muchos invitados, tan solo medio centenar aproximadamente.
Además, también se sabe que después de las festividades realcionadas con la boda, durante su luna de miel, la pareja viajará al país natal de la novia, Sudáfrica, en torno a los días 8 y 9 de julio de 2011.
Parece ser que esta boda "no dejará de sorprender a los observadores de la vida monegasca" y con ella, la ex nadadora se convertirá en una auténtica princesa (por cierto, no hace falta decir que estoy deseando ver el vestido de novia, ¿verdad?)
Desde luego, no hay duda de que será una de las grandes bodas del año que viene. Claro, que si viene tan cargadito como este...
Alberto de Mónaco también se casa
Pues nada, sigue la racha de bodas de famosos, y algunas de ellas de lo más sorprendentes. Y no lo digo (bueno, al menos no solo) por la de Brad Pitt y Angelina Jolie. Y es que ahora ha sido el príncipe Alberto II de Mónaco, que ya tiene de 52 años, el que ha anunciado que se va a casar con la ex nadadora sudafricana Charlene Wittstock.
Otra boda más entre un miembro de la realeza y una persona que no lo es. De momento, no sabemos nada acerca de la fecha de la boda, ni de dónde va a tener lugar, aunque según manda el protocolo, tendrían que esperar por lo menos seis meses antes de oficiar las nupcias.
La pareja lleva ya 4 años de relación, aunque ya se conocían desde el año 2000, cuando la nadadora ganó un campeonato de natación celebrado en Mónaco. Poco a poco, la pareja se ha ido dejando ver en actos públicos, dentro y fuera del Principado.
Está claro que Alberto de Mónaco ha sido (hasta ahora, claro) uno de los solteros de oro más cotizados, perseguido por la prensa del corazón y al que se le han atribuido relaciones de lo más variopintas: desde Brooke Shields hasta Claudia Schiffer (y esto solo por poner un ejemplo)
Además, Alberto deMónaco tiene dos hijos de relaciones anteriores, esporádicas, eso sí.
La constitución monegasca marca que la nadadora, si no se convierte al catolicismo (ella es protestante) no podrá acceder al trono de Mónaco.
Así, llega una de las bodas más esperadas. De hecho, eran muchos los que aseguraban que Alberto de Mónaco ni siquiera se casaría.
Foto de Hola